Que los grandes pensadores de la historia hicieron mucho por la filosofía qué duda cabe, sin embargo, cuando hablamos de la logística no solo pasa por filosofar y pensar, sino que también pasa por aplicar, y es ahí donde esta filosofía debe llevarse a la práctica, pero la pregunta es ¿los profesionales que son buenos filosofando, son buenos también aplicando? En esta editorial trataremos de contestar esto y mucho más.
Pero vamos por partes, hoy en día tenemos distintos Gerentes de Logística y Operaciones que técnicamente (teóricamente) han leído mucho de lo que significa esta gran área, pero ¿saben cómo llevarlo a la práctica? Difícil respuesta, considerando que la mayoría de ellos jamás se han subido a un camión, barco, tren o avión de carga; y es ahí donde necesitamos que ellos se involucren en la operación, conociendo primero que nada a las personas y después que es lo que hacen cada una de ellas, pero no en forma teórica, sino que práctica, es decir, que metan sus “patitas al barro”.
Los logísticos somos personas de terreno, si bien tenemos nuestra base ingenieril o técnica, siempre tenemos la inquietud de conocer “in situ” como se hace cada cosa y no solo por ser entretenido, sino que si hacemos esto nuestros equipos validarán las decisiones que vayamos tomando en cada situación, ya que sin duda dirán “el Jefe sabe lo que hace ya que estuvo conmigo en el puerto o centro de distribución ayudándome a hacer mi trabajo”; esto más que un tema romántico, es una necesidad de supervivencia en las empresas, sin líderes logísticos de este tipo, difícilmente podremos entender lo que quieren nuestros equipos y los clientes.
Por ejemplo, si somos Gerentes o Líderes en Logística nos debiésemos preguntar ¿en este mes cuantas veces he ido al Centro de Distribución? O simplemente ¿Cuándo fue la última vez que me reuní con mis chóferes de camiones? Si la respuesta es negativa, la pregunta es ¿Cómo vamos a entender a nuestros clientes si ni siquiera sabemos que pasa dentro de nuestros equipos?, como dijo Condorito “¡plop!”.
Entonces, queridos logísticos, que viene primero ¿el huevo o la gallina? ¿podemos ser buenos lideres logísticos si solo conocemos la teoría y nos encantan las oficinas y escritorios? Uff!, la respuesta es obvia, y como hemos dicho muchas veces lo obvio es lo más difícil de explicar, quizás por eso tenemos muchos Gerentes de Logística sentados todo el día enviando correo o soñando con la logística lunar, esto es mucho más simple, tomen el auto y váyanse a terreno, a buen entendedor pocas palabras.
Los invito a hacerse las preguntas y revisar si esto pasa en sus empresas, aunque sea solo producto de mi imaginación y esto no pasa en la vida real, como dice Condorito otro “¡plop!” definitivo.
Rodrigo Rojas Toledo para www.deLogistica.com
PD: Condorito es una ilustración chilena muy famosa, es como nuestro Mickey Mouse, y que cada vez que pasaba algo que era inverosímil o increíble decía ¡Plop!
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