Nombre | Maryori Abad Muchari |
Profesión | Ingeniera Industrial – MBA |
Cargo | Especialista en Supply Chain Management |
País | Perú |
¿Cuál fue su primera experiencia en Logística?
Mi primera experiencia en Logística la tuve desde casa, mi padre era experto en el área desde temprana edad, y siempre escuchaba sus coordinaciones, proyectos y algunos problemas de su trabajo, ahí nació esa curiosidad por el área. Esto me llevo a involucrarme en sus proyectos desde pequeña, apoyando la parte operativa claro está, porque considero que, para llegar a ser grande, se debe empezar desde abajo. Lo que me atrajo desde un inicio de la gestión logística fue la satisfacción grande que se consigue al obtener los resultados deseados, porque al ser un sector que satisface necesidades de clientes externos e internos, se siente una doble satisfacción, además de la complejidad del proceso que conlleva satisfacer a tus clientes, porque no solo se necesita una parte analítica, sino también habilidades blandas para poder cumplir con los objetivos trazados. Es así que, al culminar la universidad, ya tenía clara el área en el que quería especializarme, lo que me llevo posteriormente a complementar mi experiencia profesional con varios cursos y especializaciones en logística.
¿Qué es lo más complejo de gestionar en el área logística?
Considero que el área en sí es compleja pero emocionante, pero si tuviera que elegir lo más complejo son los llamados “incendios”. En teoría, esto suele ocurrir con mayor frecuencia en empresas pequeñas y medianas ya que las empresas grandes ya han pasado por muchas experiencias que los ha llevado a definir procesos y regulaciones más estrictas, por lo cual los indicadores de ello son mucho menores con respecto al de las demás empresas. Denomino “incendios” a aquellas tareas no planificadas que se deben cumplir prioritariamente y ello hace que tu planificación se desvíe, a pesar que una empresa tenga un ERP de última tecnología, lo prioritario son los procesos, porque las emergencias pueden llevar a problemas más grandes, una vez que falte stock de cualquier mercadería, se para la producción, o se continúa si es reemplazado por un material genérico arriesgando la calidad del producto final y por ende la satisfacción del cliente. Ello lo he considerado como el más complejo de gestionar porque estas tareas pueden provenir de todas las áreas, y para poder subsanar ello tiene que ser una gestión de manera conjunta.
¿Cuál es el proyecto logístico del cual se siente más orgullosa?
Puedo decir que me siento orgullosa de varios, pero sobresale uno de mi última experiencia laboral en el sector minero porque abarcó muchos aspectos; como mencioné anteriormente considero muy importante los procesos y la gestión conjunta de las áreas involucradas.
Teníamos un clima laboral complicado junto con el área de producción debido a la falta de abastecimiento de ciertos productos que los obligaba a salir frecuentemente fuera de sus horas de trabajo, obviamente si el cliente interno no encuentra el producto en almacén da por hecho que el área de logística no está trabajando correctamente, pero ello abarcaba mucho más, por ejemplo: había un desorden al solicitar los materiales, a nivel de pedido y despacho, no se manejaba stock de seguridad de los productos terminados y por último la vida útil de ciertos materiales eran inferior a lo establecido; todos estos problemas involucraban cinco áreas principales: planeamiento, producción, mantenimiento, operaciones y logística. Por lo cual se estableció procesos de manera conjunta y empezó el denominado “Proyecto de abastecimiento” que implicaba un nuevo layout del almacén, y también mejorar la planificación que nos permitía conocer los puntos de pedido óptimos para cada material rotativo y del que no también.
El resultado fue impresionante, no solo se obtuvo un nivel de abastecimiento óptimo a nivel de producto, sino también mejoró el nivel de exactitud de inventario, el tiempo de atención se redujo en un 50%, diversificamos la cartera de proveedores y mejoramos las condiciones comerciales para todas las categorías. Este proyecto finalmente ayudó no solo a generar un proceso eficiente y cronometrado, sino también se convirtió en una gestión totalmente integrada y colaborativa entre todas las áreas involucradas.
¿Qué importancia tienen para usted las personas en los equipos logísticos?
Las personas son la principal fuente de todo equipo, y en el logístico no es la excepción. A pesar de que cada persona posee diferentes perfiles y experiencias, siempre los he motivado para que sepan cada subproceso de la cadena de suministro, por ejemplo: a la persona de compras que vea la parte de distribución y a la persona de distribución que vea compras, y todo ello por un día, con el fin de que entiendan el trabajo de su compañero, si no existe un buen compañerismo entre todos, lastimosamente no cumplimos nuestros objetivos planteados de forma eficiente, porque nos ponemos barreras en nuestra propia área. Otro punto importante es saber escucharlos, conocer más sobre ellos, qué metas tienen en la vida, cuáles son sus motivaciones, ser más humano; eso no quiere decir mezclar lo personal con lo laboral, sino entenderlos para identificar sus fortalezas y debilidades, ser parte de su crecimiento en sus áreas de mejora, el resultado de ello es un equipo más capacitado que brinda mejores y excepcionales resultados.
Desde su perspectiva, ¿qué falta para que más mujeres se integren a trabajar al área logística?
Confianza en sí misma, nada es difícil si confías en ti, a nivel externo puede parecer un área ruda por todos los procesos que involucra y los prejuicios existentes, porque lastimosamente prejuicios van a existir.
Recuerdo una de mis primeras experiencias en una empresa de consumo masivo, que el primer día al ingresar, todos eran hombres y me sentí intimidada, porque al cumplir las tareas designadas, los escuchaba conversar que era fácil lo que realizaba por el hecho de ser mujer, pero eso no impidió demostrarles mi capacidad en la logística inversa, de salida y de entrada, ya que tuve la oportunidad de ir escalando en esa empresa; guardo con mucho cariño ese recuerdo, porque a pesar de los obstáculos que te pueda poner la vida tienes que creer en ti para llegar a la meta.
Hace poco me compartieron una idea que no me lo había planteado y que ahora doy fe a ello, nosotras también necesitamos un pequeño empujoncito entre nosotras mismas para poder avanzar, y ello lo podemos conseguir a través de charlas, eventos, programas, escuchar experiencias de otras mujeres que han pasado por lo mismo, nos ayuda a esclarecer nuestras tácticas y objetivos.