Nombre | Soledad Lama Mondria |
Profesión | Economista |
Cargo | Gerenta General |
Empresa y País | Comaco – Chile |
¿Cuál fue su primera experiencia en Logística?
A los 17 años (año 1992) me tuve que hacer cargo de Comaco, porque mi papá, que era el dueño, tuvo un accidente gravísimo en avión. Se encontraba haciendo instrucción de vuelo en un aeroplano anfibio en la laguna de Aculeo y el aparato durante el amarizaje se desintegró y mi padre quedó politraumatizado y hospitalizado. Recién salida de cuarto medio, me tocó despachar grúas horquillas, coordinar traslados en camión, organizar compra de gas y petróleo, pagar sueldos, y abrir y cerrar la empresa que estaba en el barrio de 10 de Julio. Un desafío enorme que forjó mi carácter.
¿Qué es lo más complejo de gestionar en el área logística?
Encontrar el equilibrio entre entregar un muy buen servicio, en materia de tiempos de respuesta y calidad, manteniendo los costos controlados por un lado, y por otro, trabajar en un mercado como el chileno, bastante inmaduro en materia de servicio al cliente, donde hay que negociar permanentemente con proveedores que muchas veces no alcanzan tiempos de respuesta óptimos ni aseguran controles de calidad exigentes. En este sentido es un gran desafío alinear la cadena de suministro aguas arriba, para llegar bien en la etapa de entrega al cliente. El trabajo de selección de proveedores, de comunicación permanente con éstos, de lograr acuerdos, de registrar no conformidades en los procesos, y buscar la mejora continua cada vez que hay desviaciones, no se puede abandonar, pues la reiteración de errores en ese caso es muy probable, y en consecuencia la experiencia de servicio del cliente no es bien evaluada.
¿Cuál es el proyecto logístico del cual se siente más orgullosa?
De la puesta en marcha del contrato de arriendo a cuatro años, de nueve equipos de alto tonelaje, para Gerdau Aza, en marzo de 2017. Esta importante empresa del mundo del acero tuvo la oportunidad de experimentar nuestra capacidad de reaccionar ante las dificultades, nuestra total orientación al cliente, nuestro compromiso por buscar la exacta especificación de equipo para cada área de producción, con muchas pruebas en terreno, y nuestra permanente oferta de valor configurando aditamentos instalados en los equipos para hacer más segura su operación.
Hemos sido capaces de lograr con un cliente altamente exigente como Gerdau Aza, una comunicación permanente y fluida, y hemos tenido el honor de tenerlos varias veces en nuestras instalaciones del Parque Industrial Enea, donde han podido constatar en terreno, lo alineados que estamos en materia de seguridad laboral y respeto con el entorno. En sus visitas, Gerdau Aza ha evidenciado que realizamos nuestra actividad de mantenimiento, lavado y pintura de equipos, así como de almacenamiento de sustancias peligrosas, en dependencias que cumplen los más altos estándares nacionales e internacionales en materia de seguridad y cuidado del medio ambiente. Me siento orgullosa del servicio que somos capaces de dar y de la forma responsable en la cual lo damos.
¿Qué importancia tienen para usted las personas en los equipos logísticos?
Es categóricamente lo más importante. Sin un equipo fuerte, comprometido, contento, apasionado, donde cada parte aporta y ofrece sus talentos y habilidades, no se puede lograr el máximo potencial. En Comaco tenemos un gran equipo, con un promedio de antigüedad laboral de 8 años y con bajísima rotación, que siente además un gran cariño por la empresa, creemos que son muy importantes aspectos como instancias frecuentes y programadas de comunicación y trabajo grupal; transparencia de datos relevantes de la compañía para lograr confianza y empatía; conocerse desde lo personal, y aprender a escucharse; compartir metas y visiones individuales para la empresa, para construir metas en conjunto; y atreverse a compartir y hablar sobre fracasos, frustraciones, errores y logros. La comunicación logra un fiato en el equipo que permite finalmente ofrecer la mejor experiencia de servicio posible a los clientes.
Desde su perspectiva, ¿qué falta para que más mujeres se integren a trabajar al área logística?
A nivel global una mayor integración de la mujer al mundo de trabajo se logra, como hemos visto en Europa, con políticas públicas que promueven la igualdad de oportunidades en el acceso al mercado laboral; con políticas de “acciones positivas” que buscan revertir la discriminación cultural o de base que sufre la mujer, por ejemplo a través de fijación de cuotas de contratación; y con medidas más transversales donde el Estado promueve de manera consistente en todos sus programas y proyectos, la equidad de género.
A modo de ejemplo, hay que avanzar en disminuir la diferencia en la carga horaria del trabajo de cuidado de los hijos: mientras las mujeres invierten 4 horas y 30 minutos diarias los hombres sólo 1 hora y 20 minutos. Esto limita la capacidad de las mujeres de incrementar sus horas de trabajo remunerado. Como resultado, en todo el mundo, las mujeres que representan menos de 40 por ciento del empleo total.
A nivel profesional en Chile aún persiste una baja población estudiantil femenina en carreras como las ingenierías, la ciencia y la tecnología, y una alta presencia en las carreras de humanidades, la salud y la educación. Esto contraviene la idea de incorporar más mujeres en logística.
Sin embargo, a nivel técnico y de oficios para el área logística, una gran idea es crear instancias de diálogo entre las empresas que requieren mano de obra femenina con cierta especificaciones, las municipalidades que fomentan la integración al mercado laboral y los organismos capacitadores como las OTEC, y los Centros de Formación Técnica, para lograr desarrollar en conjunto programas de aprendizaje a la medida, preparando a la mujer para desarrollar trabajos que efectivamente sean demandados por la industria logística.